3 señales de que los monitores intrauditivos Soundbrenner Wave podrían (de la mejor manera) arruinarte la vida

¿Buscas los mejores in-ear monitors por menos de $100?

Mira, tenemos que hablar en serio. Los Soundbrenner Wave in-ear monitors están a punto de arruinarte todo tu ecosistema de audio, y la verdad, no lo lamentamos. 

1. Te convertirás en esa persona que nota el mal audio en todas partes

¿Recuerdas cuando eras felizmente ajeno a que el altavoz Bluetooth de tu amigo sonaba como si se estuviera ahogando en una pecera? Esos días se acabaron. Los controladores dinámicos de doble imán de 10 mm de los Wave IEMs te arruinarán para siempre el sonido mediocre.

Empezarás a:

• Hacer muecas con las playlists de la cafetería

• Criticar el sistema de sonido de tu gimnasio

• Decir cosas como “el escenario sonoro se siente apretado” en las fiestas

Aviso justo: una vez que escuches cómo suena una verdadera separación de instrumentos, no querrás volver a usar auriculares que hacen que todo suene como si estuviera dentro de una lata.

2. Olvidarás cómo suena el ruido de fondo

El aislamiento de ruido de 36dB es básicamente protección de testigos para tus tímpanos. ¿Esa obra fuera de tu apartamento? Desaparecida. ¿El dudoso gusto de tu compañero de piso por la tele basura? Esfumado. ¿El bebé llorando en tu vuelo? ¿Qué bebé?

Esto crea un efecto secundario peligroso: puede que empieces a disfrutar realmente tu trayecto. Podrías convertirte en una de esas personas serenas del metro que parecen extrañamente zen mientras todos los demás sufren la sinfonía del caos urbano. Puede que tu nivel de estrés baje. Puede que tu presión arterial mejore. Es sinceramente preocupante la paz que vas a experimentar.

No te sorprendas si la gente piensa que te fuiste a un retiro de meditación. Estos son los mejores IEMs de aislamiento pasivo que puedes conseguir por menos de $100.

3. Desarrollarás expectativas poco realistas sobre la comodidad

Con 26g y varias opciones de puntas, estos auriculares te van a malcriar. Se ajustan tan bien que olvidarás que los llevas puestos, lo cual suena genial hasta que intentas usar literalmente cualquier otro auricular de nuevo.

Te convertirás en el equivalente auditivo de alguien que solo ha volado en primera clase intentando meterse en turista. Otros auriculares te parecerán dispositivos de tortura medieval. Te preguntarás cómo toleraste esa sensación punzante que antes llamabas "ablandarlos".

La incómoda verdad (y la llamada de atención de $99)

Esto es lo que nadie te dice sobre conseguir unos auriculares realmente buenos: te hacen darte cuenta de cuánto te has estado conformando. Es como ponerte gafas por primera vez y descubrir que los árboles tienen hojas individuales, o probar jarabe de arce real después de años de imitaciones de jarabe de maíz.

Los monitores intrauditivos Wave cuestan menos que la mayoría de los auriculares "premium" (¡ahora mismo en oferta por $99!) y ofrecen mejor sonido, comodidad y aislamiento. Esto debería sentirse como una victoria, pero en realidad solo te hace cuestionar cada otra compra de audio que has hecho. ¿Por qué gastaste el doble en esos otros auriculares que suenan como si estuvieran bajo el agua? ¿Qué otras mentiras te ha contado la industria del audio?

¿Listo para escuchar lo que te has estado perdiendo?

¿Y ahora qué? Tienes dos opciones. Puedes fingir que nunca leíste esto y seguir viviendo en feliz ignorancia con tus auriculares actuales, convenciéndote de que "suficientemente bueno" en realidad es bueno.

O puedes aceptar que tus estándares de audio están a punto de subir drásticamente, tu tolerancia al ruido de fondo va a desaparecer y tus expectativas de comodidad en los auriculares van a volverse totalmente irracionales.

De cualquier manera está bien. Pero si eliges la opción dos, no digas que no te lo advertimos.

Consigue los monitores intrauditivos Wave y arruínalo todo

Los efectos secundarios pueden incluir: mejor estado de ánimo, mayor apreciación de la música y una necesidad irresistible de contarle a la gente sobre las curvas de respuesta de frecuencia.